martes, 23 de diciembre de 2014

Redención bajo tu piel...

La tarde transcurría tranquila, llevaba días bastante liado en el trabajo y agradecía el parón; mientras tomaba un café en la máquina del trabajo siento la vibración del teléfono, lo saco de mi bolsillo y leo el mensaje. Una felicitación de mi amiga la peluquera, la respondo von otra felicitación y deciendola que tengo que acercarme por allí a cortarme nuevamente el pelo. Ella me responde sino quiero un masaje de la casa. Sonrio al leerla y la respondo que me encantaría dejando varios puntos suspensivos.  Me dice de quedar hoy a última hora de la tarde. a lo cual accedo escribiendo "y no solo a cortar el pelo...." al cual ella me responde un "ummmm estaré esperándote".

Acabé mi café y al poco tras terminar con algo de papeleo, me fui  rumbo a la peluquería.
Me gustaba la idea de que ella tuviera las mismas ganas de quedar que yo.
Abri la puerta del establecimiento y ella ya me esperaba, dos besos en las mejillas como recibimiento y una cálida sonrisa, me senté en la silla mientras ella me lavaba la cabeza y charlabamos de vanalidades. Notaba como sus manos se deslizaban rápidas y con la agilidad de miles de horas repitiendo la misma tarea, tras veinte minutos,  finalizó y ambos deseábamos escapar del local y estar solos los dos.

Ese momento llegó, sentía su mano agarrada a la mía,  mientras avanzamos por la acera, saqué una caja de mi maletin. Ella se sorprendió, abrelá le dije, quitó el lazo y al abrirla extrajo un pañuelo de seda negro. 
- Espero que te guste.

Ella me miró a los ojos y me besó.
Nuestros pasos nos dirigieron a mi casa, la presión de su mano crecía conforme el ascensor nos elevaba. La puerta se cerró, dejamos los abrigos en el perchero, mis manos cogen sus brazos, atrayéndola hacia mi, mientras nuestras bocas se desean, siento su cuerpo estrechado contra el mío y el calor que emana. 

Nuestras manos comienzan a perderse en la piel del otro, lentamente nos dirigimos a mi habitación, las prendas van cayendo sobre parqué como restos de una batalla. Mi boca desciende por su cuello, sus pechos se estrechan contra mis manos, que los amasan y presionan. Sus dedos juegan por mi abdomen;  noto como mi excitación crece y mi polla comienza a endurecerse buscando el contacto de su cuerpo. Sus yemas la recorren de abajo arriba, sintiendo cada vena que la dibujan.  Me tumbo sobre ella, sus piernas me envuelven y atrapan. Mi boca busca sus pechos, deslizo mi lengua por ellos, endureciéndose bajo mi saliva. Mis labios aprietan sus pezones, ella me dice que mas fuerte, obedeciendo sus palabras incremento la presión y un primer gemido escapa de su garganta. Mis ojos ven el pañuelo de seda, lo tomo entre mis manos, junto sus muñecas y las ato en el cabecero. Sus ojos reflejan el deseo, las ganas de descubrir más, avanzar en nuevas experiencias. 
Me levanto de la cama y voy a la cocina, traigo un vaso con hielos. 
Tomo uno y lo sitúo entre sus pechos, su piel se eriza con el avance del hielo bajo mis yemas, sus pezones apuntan hacia mi boca, la cual los lame y recorre, el cubito va fundiéndose sobre su piel perdiendo su forma original, mis dedos resbalan sobre ella. Una de mis manos baja hacia su sexo, primero juego con su clítoris,  mis dedos lo pinzan y presionan, provocándola oleadas de placer;  para después irse hundiendo poco en su coño empapado. 
Se oye el movimiento de estos en su interior acelerando su respiración.  

Noto como mis yemas se arrugan con sus fluidos,  surgiendo y dibujando figuras sobre su abdomen. Ella me pide esos dedos, quiere lamerlos, los acerco, pero solo in leve roce en sus lábios, impregnándola de su propia humedad. Mi otra mano desciende y avanza entre sus nalgas, busca su pequeño orificio, antes de abrirlo, su lengua los ha lamido con eficiencia,  noto las gotas de su saliva resbalando por ellos. Hecho esto, bajo hacia su culo y comienzo a rozarlo y presionarlo en circulos, mi falange se adentra, provocando el arqueamiento de su espalda, mi otra mano vuelve hacia su sexo, hundiéndose nuevamente,  esta vez el ritmo es continuo en ambas manos,  a lo que su cadera responde imitando el movimiento. La observo, gotas de sudor comienzan a aparecer en su frente  su boca se seca, y la respiración  se acelera, aumento el movimiento, mi dedo se hunde completamente en su culo y resbala en su interior. 
Ella me pide que no pare, y no lo hago aumentando un poco mas la presión  y iniciando la entrada de un segundo dedo. Al hacerlo, ella comienza a correrse con fuerza, su humedad moja mis sabanas, pese a ello continúo mientras ella se retuerce de placer. 
Poco a poco el movimiento va perdiendo intensidad, mis dedos se recrean con su sexo y su culo, mis muñecas se mueven en círculos, ella va relajándose,  observa mi excitación al contemplarla. Poco a poco mis dedos surgen de ella. Para deslizarse sobre su cuerpo,  llegando a su boca. Su lengua los lame con deseo, fundiéndose  en ella su esencia. La contemplo de nuevo y..... 


Continuará...

lunes, 22 de diciembre de 2014

Aritoctazy 2...

Nos adentramos dentro del Hall, entregamos las invitaciones, mientras siento la mirada de la seguridad, serios y con caras de pocos amigos. Nos abren las puertas y entramos en un gran salón,  la luz es muy tenue, me llama la atención la amplitud del recinto y la cantidad de gente. Todos ocultos bajo sus misteriosas máscaras. Noto la mano de María que me va guiando entre la gente; la música es suave, observo como la mayor parte de los asistentes tienen copas en sus manos; nuestros pasos se dirigen hacia una barra donde nos sirven 2 copas de champán.  Laa miradas se entrecruzan y el murmullo asciende, hasta que aparece en un estrado una figura, embozada bajo una capa negra y con su inseparable máscara.  La música se detiene, palabras de recibimiento seguidas de varios formalismos. Mientras habla van apareciendo otras figuras, disfrazadas como en la mitología griega.  Una estatua de Baco surge tras ellos, de ella surge vino, siendo e realidad un surtidor. El anfitrión comienza a recitar frases en latín a lo que el resto va repitendo al unisono. Hasta llegar a un canto en el que todos participan, seguidos de un brindis generalizado. La música vuelve a surgir, es monótona y repetitiva. Las figuras que escoltaban al personaje principal comienzan a danzar sobre un escenario, sus movimientos al inicio lentos, van ganando rapidez y sensualidad; conroces y co torsiones cada vez mayores, mientras comienzan a desnudarse frente al resto. La gente comienza a formar grupos, se oyen murmullos, risas... siento como la gente se va animando,  como una marea que va recorriendo el salón, envolviendonos lentamente....
Bss

sábado, 20 de diciembre de 2014

Aristocrazy...

El dia en la oficina fue tranquilo, salí a tomar un café y al volver tenía un sobre negro en la mesa. Lo primero que hice fue abrirlo y leerlo, solo una sucinta frase; "habla con María y muestrale el sobre". Es curioso por que Maria es mi jefa y me parecia raro lo que estaba sucediendo asi que me dirigí a su despacho. Toc Toc,  un adelante con voz  femenina respode desde el interior.
Hola María,  acabo de recibir esto y me resultó curioso, no se si te suena...
Ella me observa y coge el sobre junto con la nota; sus ojos leyeron varias veces la nota para terminar diciéndome; vamos  fuera a tomar algo; tengo algo que contarte.
El misterio rodeaba sus palabras  opté por acceder y salimos.
Ya en una cafeteria y frenre a dos humeantes tazas de café me comentó que conocía a cierta gente,  los mencionó como un círculo,una sociedad paralela y que tras haber hablado ella de mi, sentian curiosidad por conocerme. Me aludió que eran reuniones donde se rendía culto a antiguas divinidades, y próximamente sería la de Baco. La miré a los ojos; mis ojos reflejaban sorpresa, yo pensaba que esto pertenecia a novelas o películas pero np al mundo real. Ella me alude que el que se hallan interesado por mi es un privilegio que me proporcionará beneficios a futuro. Gente poderosa con medios; que juegan con las vidas de otros.
Mi mente era un torbellino donde mis pensamientos se sucedían vertiginosamente, la dije que seguiría adelante,ella seria guía en esta nueva experiencia.
Este sábado se celebrará la reunión; coincidiendo con la luna nueva, te recogeré en tu casa, imprescindible traje negro y una máscara, pero de esta yo me encargaré. Yo acepté dejandola a ella indicarme los pasos y tempos a llevar.
Una vez en casa,  mi mente se habia quedado anclada en lo que me había ocurrido, pero con una curiosidad que me empujaba a seguir adelante.

El día señalado llegó permanezco frente al espejo ajustándome la corbata, también negra como el resto de mis prendas. El móvil sonó y bajé  al portal donde me esperaba mi jefa en su coche.  Entre en él; me saludó y me entregó una máscara de estilo veneciano,tras un silencio prolongado,este se rompió con un escueto:tranquilo yo te guiaré.
Mientras el vehículo avanzaba por la noche; adentrándose en una urbanización donde las mansiones iban apareciendo, bordeadas por grandes setos de granito y vegetación.  Tras varios minutos al fondo aparecíó una gran puerta donde el vehículo se internó, coches de lujo repartidos a ambos lados del acceso daban una imagen de que tipo de gente habría dentro. Nos detuvimos, un aparcacoches tomo las llaves y ambos accedimos al interior de la mansión......
Continuará....

miércoles, 17 de diciembre de 2014

húmedas confesiones 3...

La puerta se cerró tras nuestras espaldas, como un imán nuestros cuerpos se atrayeron, en el que nuestras bocas se bebian. La estrechaba contra mi pecho, su calor acariciaba mi piel, su lengua recorria mis labios, mientras mis brazos retiraban su abrigo. Avanzabamps hacia la cama, la senté en la esquina de esta, agachandome delante de ella. Continiabamos basándonos,  mis manos la quitan su altos zapatos de tacón.  Mis dedos recorren su pies ascendiendo por ellos, acaricio sus largas piernas, sobre sus medias oscuras. Comienzo a bajarlas ella me facilita la tarea incorporándose.  Mis yemas descienden por sus muslos tirando de la prenda; Sus ojos siguen cada movimiento que realizo; ella separa lentamente sus piernas, mostrando un tanga negro con ribetes rojos. La miro, na sonrisa se dilucida en el rostro de ambos. Las medias caen sobre la moqueta y mis labios besan despacio sus gemelos y comienzo a ascender por su delicada piel. Mis manos la tumban sobre la cama, mi lengua lame sus ingles y voy estirando la goma de su tanga. Un escalofrío la recorre, mis dedos comienzan a rozar bajo la minúscula tela, su humedad me impregna y mi boca se aproxima  a ella. Comienza a bajar el tanga facilitando la llegada de mis labios que se recrean con su clitorix, qye se inflama entre ellos, Sus fluidos encienden mi deseo, y llennan mi boca, qye recorren su sexo lentamente . La observo como abre su blusa y comienza a tocarse por encima de su sujetador negro. Mis dedos se hunden en su cálida flor, compartiendolo con mi boca. Ella se retuerce por placer que aumenta  y el deseo crece en ambos.  Sus piernas me rodean atrayendome contra ella;  sus manos me guian al somido que marca su respiración  que comienza a acelerarse, mis manos ascienden por su abdomen y alcanzan a las suyas sobre sus senos. Sus pezones rugosos son girados por nuestras manos, mientras mi lengua se hunde aun mas en ella. Siento como su humedad se derrama en mi boca bajo un gemido de placer. La presión de sus piernas se relaja, permitiendo me subir por su cuerpo, deseando besarla. Nos buscamos y encontramos, deseosos el uno del otro. Rodamos por el colchón besandonos con furia y deseo.... en una noche muy larga y lujuriosa....
Bss

lunes, 15 de diciembre de 2014

húmedas confesiones 2.

El día señalado llegó; nublado y lluvioso,  con un nudo en el estómago cogí mi coche y me puse en camino; habíamos quedado a las 20h en un  frio mes de diciembre, el día se transformó en noche mientras los kilómetros pasabam sin cesar. Solo pensaba en verla, imaginarla junto a mi, sentir su cercanía.  Al hacerlo mis manos se aferraban al volante  y mi pie derecho se hundia en el acelerador. Tras dos horas llego al hotel y me dispongo a coger la habitación y dejar el escaso equipaje que llevaba.  Mientras lo hacia, mi móvil suena y es ella comentadome que en 20 minutos estará junto a mi. Ni que decir tiene que ese tiempo se me hizo eterno; me bajé al hall y mis ojos se perdían en la puerta de entrada, escrutando a cada persona  que entraba.
Por fin ella entró, nuestros ojos se encontraron y una explosión  de alegría y emociones nos unía a ambos.
Tras dos besos, ambos estabamos nerviosos y al principio no sabíamos como actuar, decidimos coger un taxi e irnos a cenar al centro. Elegimos un elegante restaurante y tras una botella de buen vino y una espléndida cena, parece que los nervios se fueron calmando y surgió todo aquello que nos unía... no olvidaré el contacto de su mano sobre el mantel, acariciando mis dedos y wl suave contacto de su pie bajo la mesa ascendiendo por mis piernas. Tras una porción de Selva negra  y un café decidimos volver al hotel, nuestras manos se entrelazaron mientras salíamos a la calle y buscabamos un taxi. Nuestros labios se encontraron por primera vez, note el dulzor de su boca, la suavidad de su lengua y el contacto de su  cuerpo contra el mío. Al poco apareció el taxí que nos conduciría al paraíso;  nuestras bocas volvieron a buscarse mientras nuestros ojos no paraban de mirarnos... tras diez minutos escasos entramos en el hotel, la puerta del ascensor se cerró  y mis manos abrieron su abrigo, disfrutaba sintiendo su silueta y su calor bajo mis yemas, el ascensor se detuvo y las puertas comenzaron a abrirse,  la guié por el.amplio pasillo, saqué la tarjeta de mi bolsillo y voilá la puerta se abrió. .... adentrandonos en una noche única....
Continuará. .....

viernes, 12 de diciembre de 2014

húmedas confesiones.

Esto que hoy cuento pasó hace unos años y aon experiencias que se graban en la mebte y de las que se guarda un inmejorable recuerdo. Deseos que se piensan y acaban haciéndose realidad.
Hace diez años, solía entrar por algún chat para matar el tiempo y dió la casualidad que congeníe con María. Era algunos años mayor que yo y casada, pero eso no impidió que charlaramos y quedaramos por el messenger donde el tiempo volaba estando juntos. La confianza iba a más al igual que las conversaciones, poco a poco ibamos expresando nuestras fantasías,  deseos que se mezclaban con ensoñaciones en las que ambos participabamos.
Tras meses de charla decidimos quedar y poder hacer realidad aquellas fantasías quw nos envolvían en nuestras conversaciones. Ella vivía cerca de la costa y yo en Madrid, decidimos  quedar en un lugar intermedio, elegimos Albacete. Solo faltaba concretar cuando, ya que ella al estar casada lo tenía más complicado. Tras varias semanas planeandolo pudo por fin encontrar la excusa para poder quedar conmigo. A su marido le dijo que iba a visitar a una amiga de juventud que no atravesaba por su mejor momento.
Por fin todo estaba listo en pocos días estaríamos frente a frente.....
(Continuará)

martes, 2 de diciembre de 2014

Por los pelos 3.

Sus manos descienden por  mi pecho, calidas y suaves, realizan delicados circulos, en un movimiento lento, su vestido se va abriendo despacio apareciendo un sugerente sujetador negro, mis manos lo rodean y encuentran el cierre, ella siente mis dedos como la liberan de la presión y la voy despojando de la prenda. La empujo ligeramente hacia el respaldo del sofá y mi lengua comienza a deslizarse entre sus senos,  sus pezones se erizan  bajo mis labios que los besan y humedecen. Presiono el arilo de sus senos entre mis labios y mi lengua, sus manos se situan en mi cabeza y me empujan contrra ella. Levanta su cintura y su vestido cae por encima de sus medias, mueve los pies sacandolos de sus zapatos y cae en la alfombra.  Mis manos acarician el borde de sus pechos y comienzan a vagar por su piel. Esta se eriza bajo mis yemas, estiro la goma de su tanga, juego con el rodeandola, siento el contacto de sus nalgas bajo mis palmas.  Las apreto y ella separa sus piernas. Mi dedo indice va retirando poco a poco el poco tejido que cubre sus nalgas y va descendido,  hasta llegar a su sexo. Está empapada, moja mis falanges que acarician sus labios. Mi pulgar se posa sobre su clitorix, lo presiono con suavidad y su cuerpo se estremece. Comienzo a retirar su tanga y lo voy bajando pir sus piernas. Beso su abdomen y sus manos se posan sobre mis hombros conduciendo a sus mas intimos rincones. Levanto la vista, ella recostada en el sillón,  sus piernas se abren y empuja mi rostro hacia su sexo. Me arrodillo, ella revuelve mis cabellos, mi lengua recorre sus húmedo sexo,  abriendolo para mi. Mis labios rozan y chocan contra au clitorix y ella se estremece y gira, gemidos escapan de su boca, mis dedos comienzan a hundirse en ella. Resbalan entre sus fluidos. Sus manos bajan lor mi espalda y comienzan a rodear mi cintura, abre mi cinturón y cada uno de los botones. Tres dedos la penetran y un cuarto juega con su clitorix,  ella se tumba, su espalda se arquea y su respiración se entrecorta, comienza a correrse, literalmente moja mis labios y yemas. La siento tan excitada que el morbo comienza a correr por mis venas.  Me separo de ella, ella me mira, me sitúo de pie muy cerca de su cuerpo,; sus manos bajan mi pantalón,  palpa por encima de mi boxes la silueta abultada de mi pene, que asoma por la goma, ellla comienza a liberarlo,  lo coge con ambas manos y lo lame con avidez, su boca la succiona impregnado se de gotas lechosas que perlan sus labios, el verla asi aumenta mi excitación y mis manos toman su rostro y comienzo a follar su boquita, debode tener cuidado  ya que rozo contra su garganta.  Sus dedos rozan mis huevos mojados por su saliva.  Su lengua aflora y asciende por mi polla, esta se endurece y palpita bajo ella. Las venas  palpitan con desenfreno, paladeando estos momentos.... sus dedos rodean mi glande, fundiendose en su boca,  lo lame mirandome, provocandome con el fuego de sus ojos, sus dedos presionan con fuerza mi boca se abre por el placer hasta que una oleada irrumpe, corriendome entre sus labios y sus senos. Su lengua las toma y saborea deleitandose ante mis ojos....
Continuará. ..

lunes, 1 de diciembre de 2014

Por los pelos 2...

Sentia un hormigueo en el estómago; ya se acercaba la hora en la que había quedado, cerre la puerta de mi casa y me dirigí a la peluquería. La lluvia comenzaba a caer mezclada con pequeños copos, más que una copa me apetecía un buen café, al poco llegué y esperé,  mientras consultaba el móvil.  A los cinco minutos, la veo doblar la esquina, sus tacones chocan contra el suelo y se oye el eco de sus pisadas, una gran sonrisa aflora en su rostro, que me contagia al verla. Dos besos de rigor y un poco de charla relacionada con el frío, la digo de ir a una cafetería cercana a tomar algo y refugiarnos de la nieve y el frio. Agradecemos el calor del local, música de jazz sonando suavemente,  nos sentamos en u a mesa frente a frente. Nos miramos, unas sonrisas nerviosas hasta que ella se sincera y comienza a hablar: no pensé que vinieras, la verdad es que nunca he hecho esto,  pero me llamaste la atención y tenía mucha curiosidad. . La observo y la respondo;  que me sorprendieron mucho los mensajes, pero que también me picó la curiosidad.
El ambiente se va relajando, bebo mi café mientras observo sus ojos como me escrutan, la conversión se anima, comienza a contarme alguna anécdota,  hasta que la digo si quiere tomarse algo en mi casa. Sus pupilas se dilatan y un ligero temblor recorre sus manos. Estas se posan en las mías y me dice que si. Que la encantaría.
Abandonamos el local y 5 minutos lllegamos al portal. Lo abro y tomamos el ascensor; este se detiene y giro la cerradura de casa. Entramos y la muestro el salón mientras la pregunto que desea tomar. Me acerco con dos wiskies, los hielos tintinean en mis manos, dejo los vasos en la mesa y guardo su abrigo.  Me siento junto a ella, percibo el olor de su perfume, escasos centímetros nos separan, nos miramos y brindamos. Chin chin; nuestras miradas se cruzan y poco a poco nuestras manos se entrelazan a la par que nuestras bocas se buscan y funden. Saboreando el licor a través de su boca; su lengua irrumpiendo contra mis labios,  y el contacto de su pecho contra mi camisa... que poco a poco va abriendo mientras sus yemas resbalan por mis pectorales, las mias recorren su cuello y van abriendo despacio la cremallera de su vestido, los tirantes van descendiendo guiadospor mis dedos y mi lengua roza su garganta aumentando su excitación. Mi camisa cae sobre la alfombra y noto como mi cinturón se afloja bajo sus manos......
Continuara..... BSS